Miami - San Francisco
Salimos a San Francisco desde Miami, tuve la suerte de quedar del lado de la ventanilla y como eran las 7 am apreciar el amanecer. El sol iluminaba mi ventana mientras flotábamos por encima de las nubes y veíamos ese colchón iluminado por el sol con la ciudad abajo, el río dividiéndola y el océano haciendo reflejo del cielo. 6 horitas demoramos en recorrer Estados Unidos de Este a Oeste.
Gracias a que el piloto me despertó diciendo que había un desperfecto técnico pasé el viaje mirando por la ventana. Lo primero que llamó mi atención fueron los campos cosechados por la zona de Kansas que están perfectamente delimitados con cuadrantes, que subdividen en 4 cuadrantes que por dentro se cosechan en forma de circunferencias, tan perfectas como hechas con compás! Fueron kilómetros y kilómetros de campos que simulaban Pacmans cuando había alguna franja sin cosechar. De un momento a otro empezaron a vislumbrase los picos nevados de las Rocky Mountains que se extendían a lo largo y ancho y así como abruptamente iniciaron también finalizaron para cambiar a un paisaje terracota, parte del Cañón del Colorado con el río serpenteando.
A 2 horas de San Francisco se hizo la niebla, de la ventana se veía todo blanco y cada tanto unos flashes estilo "Lost" donde solo se podía ver el progreso por el monitor que decía la altitud y velocidad, a medida que nos acerábamos llegue a pensar que el avión estaba dando vueltas en la niebla porque se demoraba, a 20 minutos se abrió el cielo y se pudieron ver los cerros de las afueras de la ciudad con sus ranchos, lagos, parques, hasta que de vuelta niebla………y después la próxima imagen fue estar encima del agua a 20 kilómetros de altura lo cual me dio pánico porque no veía donde pensaba aterrizar el piloto, hasta que muy cerca de la orilla afortunadamente estaba la pista y finalmente aterrizó, ahí caí en cuenta que el aeropuerto es sobre la costa, pero menudo susto me pegué.